Memorias de la Route 66: 9 (Albuquerque, Gallup, Chinle)

El miércoles 3 de agosto de 2005 retomamos la R-66 más clásica, pasado ya el “lazo” primitivo de Santa Fe. Pero enseguida íbamos a abandonarla de nuevo y adentrarnos en los grandes paisajes del oeste: . Es la zona de las “Cuatro esquinas” (Four Corners) donde confluyen, en un único punto, los Estados de Colorado, Utah, Arizona y Nuevo México. Esta zona fue de dominio español hasta el siglo XIX y en ella se encuentran las grandes reservas de los Pueblos indígenas (o Naciones, como ellos las llaman) Navajo, la más extensa y poblada, Hopi, Ute, Zuñi, etc.

Cerca de Santa Fe, al oeste, está “Los Álamos” el centro donde se construyó y probó la bomba atómica (el proyecto Manhattan), ahora convertido en un laboratorio nacional de investigación que abarca muchos temas, incluída la Inteligencia Artificial. Al sur llegamos a Albuquerque(pronunciado “Al-buh-kuh-ki” por los locales), villa fundada en 1706, por el gobernador de Nuevo México, Francisco Cuervo y Valdés, que se convirtió en la ciudad más importante del distrito de Río Abajo y ahora del Estado de Nuevo México. Aquí, el Camino Real comunicaba con una serie de comunidades agrícolas y ganaderas y conectaba con los asentamientos de la orilla oeste del Río Grande. La visita de la ciudad vieja de Alburquerque (Old Town), recuerda mucho la época española (foto).

Edificio “español” en la plaza de Albuquerque

Albuquerque es también el escenario de la famosísima serie de TV “Breaking Bad”, que aún no se había rodado cuando la visitamos, por lo que no pudimos localizar los escenarios de la misma.

Desde Albuquerque seguimos hasta Gallup, nudo de comunicaciones situado ya a unas 200 millas de Santa Fe. Allí comimos en el Motel el Rancho, cuyas habitaciones tiene nombres de los actores de películas del oeste que se rodaron en aquella zona y que, supuestamente, se alojaron en el hotel, como la suite de los hermanos Marx, la de Roy Rogers, la de John Wayne y la suite presidencial, dedicada, evidentemente, a Ronald Reagan.

Gallup, cruce de carreteras con la indicación de la R-66 y el anuncio del hotel “El Rancho”

Interior del Hotel “El Rancho” (Gallup)

De Gallup, nos desviamos de la Interestatal 40, por la que veníamos de Albuquerque y que coincide con la R-66, para tomar la US-491norte, NM-264 oeste, AZ-264 oeste y las carreteras indias 27 y 7 hacia Chinle, nuestro fin de tapa. Al final, muy cerca de Chinle, visitamos el Cañón de Chelly, que merece mucho la pena y que incluso puede superar en belleza, que no en tamaño, a otros paisajes cercanos como el Monument Valley e incluso el Cañón del Colorado. Aquí la carretera se extiende en línea recta hasta el infinito, como en las “Road Movies”. ¡Estamos en el Oeste!

El Cañón de Chelly (pronunciado Shay) es un Monumento Nacional que se declaró como tal en 1931. Se encuentra dentro de los límites de la Nación Navajo, y constituye uno de los paisajes habitados ininterrumpidamente más antiguos de América del Norte. Conserva ruinas de los pueblos indígenas que vivieron en la zona, desde los Ancestrales Puebloanos (o Anasazi) hasta los Navajo. El Cañón de Chelly es uno de los monumentos nacionales más visitados de Estados Unidos, cubre unos 340 km2, y abarca tres cañones principales: el de Chelly, del Muerto y Monument, tallados por arroyos que nacían en las montañas Chuska justo al este del parque. El cañón de Chelly es propiedad exclusiva del Navajo Tribal Trust de la Nación Navajo y en él viven aproximadamente 40 familias navajo. Es el único de los Parques Nacionales que no es propiedad federal y está gestionada de forma cooperativa de esta manera.

Los navajos se instalaron en el cañón hacia 1.600 y se convirtieron en agricultores seminómadas, que aprovechaban el fondo del cañón para cultivar maíz y otras plantas, al tiempo que criaban ovejas y les servía de protección contra sus enemigos. El nombre “navajo”, en su lengua, significa grandes campos de plantación. Los navajos se llaman a sí mismos Dine’é (la gente)

Nosotros visitamos fundamentalmente el tercer brazo del cañón, el Monument, donde se encuentran la Casa Blanca y la Roca de la Mujer araña.

El cartel explicativo de la ocupación del cañón de Chelly por los navajos

La Casa Blanca (White House in between)

Protegidas por un entrante de la pared rocosa se pueden ver las ruinas de un pueblo prehistórico Anasazi. Los navajos mencionan estas ruinas en su Canto Nocturno, llamándolas Kínií’ Na’ígai (Casa Blanca en medio) debido a su colorido, que proviene del encalado de sus paredes. Cuando los navajos llegaron al cañón, hacia el 1600 dC, el pueblo ya estaba en ruinas, pero en su apogeo, llegó a albergar a unas 100 personas en unas 60 habitaciones construidas con bloques de piedra, unidas con mortero de barro.

El pueblo Anasazi que vivía aquí cultivaba maíz, frijoles, calabazas y algodón en el fondo del cañón. Fabricaban finas telas de algodón, cestas y sandalias de yuca. También producían cerámica con decoraciones elaboradas.

La casa blanca incrustada en un hueco de la roca, que recuerda a San Juan de la Peña

Esta recreación artística, que figura en el cartel explicativo, muestra la Casa Blanca como podría haber sido alrededor del 1.100 dC

La roca de la mujer araña (Spider Rock)

Spider Rock es una impresionante formación rocosa, una doble aguja de arenisca de 240 metros (unos 800 pies) de altura que surge del fondo del cañón. Los navajos creían que su cima es el hogar de una deidad, la Mujer Araña, que es la que les enseñó a tejer.

La roca aparece en la película del oeste, “Mackenna’s Gold” (1969), donde mostraba, con su sombra, el camino al cañón de oro a un grupo liderado por Gregory Peck.

La roca de la mujer araña, que supuestamente enseñó a tejer a los navajos

Durante el viaje por la reserva Navajo vimos algunas casas, solas o agrupadas en pequeñas comunidades, de los pobladores (foto). La verdad es que eran pobres de solemnidad, aunque todas contaran con su muy vieja camioneta (truck) que ha sustituido al caballo. La mejor construcción que vimos en toda la reserva fue el correccional de menores de Chinle (foto)

Pequeño poblado navajo en 2005

El correccional de menores de Chinle, el mejor edifico de la zona

Dormimos en el “Best Western Canyon de Chelly”, de Chinle.

Publicado por Manu Barandiaran

Profesor emérito de la Universidad de País Vasco

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