Memorias de la Route 66: 5 (Springfield, MO- Oklahoma City)

El sábado 30 de julio de 2005, salimos de Springfield (MO) hacia Oklahoma City, ya totalmente en el Oeste USA, pero nuestra principal visita de ese día sería Tulsa, a unas 180 millas (290 km) de Springfield, por la Interestatal 44.

La mañana del día 30, listos para salir del motel en Sprigfield (MO)

Tulsa es una ciudad fundada por la tribu creek de nativos americanos hacia 1830. En 1921, la ciudad sufrió uno de los más brutales actos de violencia racista contra la población negra en la historia de los Estados Unidos. (ver más abajo)

Durante la mayor parte del siglo xx, recibió el sobrenombre de “capital mundial del petróleo”, pues jugó un papel esencial en la industria petrolera en USA. Tulsa es también un punto de referencia de la Ruta 66 y es muy conocida por su música western swing, un subgénero del country

La Masacre de 1921 (de la Wikipedia).A principios del siglo XX, Tulsa tenía una de las comunidades negras más prósperas de Estados Unidos. La «Black Wall Street» estaba situada en Greenwood, y en ella ocurrieron los disturbios raciales de Tulsa. El 31 de mayo y el 1 de junio de 1921, turbas de habitantes blancos mataron, saquearon y robaron a la comunidad negra de Tulsa, y también quemaron casas y negocios. «El peor incidente de violencia racial en la historia de Estados Unidos» duró 16 horas, hasta que el gobernador desplegó la Guardia Nacional. Oficialmente, fueron asesinados 23 ciudadanos negros y 16 blancos, pero hay estimaciones de que murieron hasta 300 personas, la mayoría de ellas negras.Más de 800 personas fueron ingresadas en hospitales locales con heridas, y unas 1000 personas negras quedaron sin hogar, al ser destruidas por el fuego 35 manzanas de la ciudad.

Estos incidentes (asesinatos para ser más exactos) aparecen en la reciente película de Martin Scorsese: “Los asesinos de la Luna”, aunque la película se centra en los asesinatos de nativos americanos de la nación Osage, dueños de las tierras con petróleo, también a manos de blancos.

En las épocas de vacas gordas, el petróleo producía suficiente dinero para que el centro de la ciudad sea aún un referente de arquitectura art déco (foto). Pero se agotó pronto y Tulsa ya no es la próspera ciudad de antaño. La recesión nacional afectó en gran medida la economía de la ciudad en 1982, cuando amplias áreas de Texas y Oklahoma que dependen en gran medida del petróleo sufrieron una caída libre en los precios debido a un exceso de producción. Tulsa fue una de las ciudades más afectadas. Pero para 1992, la economía del estado se había recuperado en gran medida,aunque en sectores no relacionados con el petróleo y la energía.

Un edificio art decó (en obras) en el centro de Tusla

En el s XXI, la ciudad ha pretendido revitalizar su infraestructura y la industria turística, como sede de equipos de hockey y fútbol americano, así como convertirse en un lugar para grandes conciertos y convenciones, con la construcción de una gran arena, el Bank of Oklahoma (BOK) Center, inaugurado el 30 de agosto de 2008

Gran parte del este de Oklahoma, incluida Tulsa, sigue siendo tierra de nativos americanos.Aunque éstos perdieron la propiedad de gran parte de la tierra después de la Guerra de Secesión, debido a su apoyo a la Confederación, el enjuiciamiento de los crímenes cometidos por nativos americanos cae aún dentro de la jurisdicción de los tribunales tribales, en lugar de someterse a los tribunales de Oklahoma.

Después de un breve recorrido del centro, admirando la arquitectura, visitamos la Oral Roberts University (ORU). Oral Roberts fue un famoso predicador evangelista que, al parecer, recibió el mandato de construir una universidad bajo la autoridad de Dios y el Espíritu Santo, “para que escuchen Mi voz, para que vayan donde Mi luz es tenue, donde Mi voz se oye débilmente y Mi poder sanador no es conocido, incluso hasta los confines más remotos de la tierra».

La universidad alberga la Torre de la Oración (foto), que mantiene siempre personal orando continuamente por la paz en el mundo (con un éxito moderado, diría yo).

Mª Eugenia en el campus de la Universidad Oral Roberts, al fondo la Torre de la Oración

Otra atracción de la misma universidad son las gigantescas Manos en Oración (foto). Es una de las esculturas de bronce más grandes del mundo. Tiene 60 pies de altura (unos 18 metros) y 30 toneladas de peso, fue creada por Leonard McMurray y fundida en Ciudad Juárez, México.

Las manos en oración, en la universidad Oral Roberts

También tuvimos la suerte de encontrar un rodeo profesional de toros (Professional Bull Riding, PBR) que se celebraba, en el Palacio de Exposiciones, pues aún no se había construido el BOK Center. Lógicamente, asistimos (fotos). El espectáculo es altamente recomendable, aunque no muy edificante. La sesión fue preparada por fuegos de artificio, un sermón por parte de un pastor (probablemente evangelista), un documental animando a enrolarse en los marines, que se comparaban con los cowboys, exhibición de lazo al estilo vaquero (imagen de cabecera de esta entrada) y, finalmente, un canto del himno nacional a cargo de una joven local. La arena y las gradas estaban ocupadas al 100% por gente blanca. La mayor parte hombres con sombrero vaquero blanco (probablemente de plástico, aunque no me atreví a tocárselo a ninguno de ellos) anchos cinturones con hebillas metálicas relucientes y un “six-pack” de cervezas y un perito caliente para amenizar el rodeo. El único negro de la velada era uno vestido de payaso que hacía el quite al toro, una vez derribado el concursante.

La arena preparada para el rodeo

Del rodeo en sí no se puede contar mucho, pues fue como los que se ven en las películas y solo hay que mantenerse 8 segundos encima del toro, así que desde lejos no se ve casi nada. Tampoco salen las fotos con las cámaras de hace 20 años, pues había poca luz y todo se movía muy deprisa. Mejor verse algunas películas, como: “Bus stop” o “Vidas rebeldes” (con Marilyn Monroe), “Junior Bonner, rey del rodeo” (con Steve McQueen) o la serie “Sin miedo” (Netflix).

Fuegos de artificio como introducción al rodeo

Ambiente en las gradas y en la arena

Al acabar el rodeo, seguimos hasta Oklahoma City (otras 105 millas ≈ 170 km), donde habíamos reservado alojamiento en el Best Western Saddleback Inn, 4300 SW 3rd Street. Llegamos muy tarde y no vimos nada de la ciudad, que tampoco tiene mucho que ver, salvo el Memorial por las víctimas del atentado del 19 de abril de 1995. En dicho atentado, el mayor hasta los del 11 de septiembre, detonó un camión cargado con 2.300 kg de explosivos caseros, en la calle frente al edificio federal Alfred P. Murrah. La explosión destruyó o dañó 324 edificios en un radio de 16 manzanas; causó la muerte de 168 personas e hirió a más de 680. El terrorista, Timothy McVeigh, un veterano de la Guerra del Golfo, culpaba al gobierno de los muertos causados en los asedios de Waco y Ruby Ridge. McVeigh fue ejecutado con una inyección letal en 2001, y su cómplice, Terry Nichols, sentenciado a cadena perpetua.

Publicado por Manu Barandiaran

Profesor emérito de la Universidad de País Vasco

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